El difícil mundo de la docencia
La situación por la que atraviesa hoy la docencia me obliga a escribir nuevamente algo en este blog. Hoy lunes 06 de marzo y mañana 07 los docentes de casi todo el país paran, exceptuando San Luís (provincia que decidió reconocer un aumento a los docentes de 38 %) y Santiago del Estero. El próximo mes de junio cumplo 24 años de docente y siento impotencia extrema al ver los comentarios que desde la mayoría de los medios se hacen sobre la actividad docente y sobre el docente mismo. Existe actualmente una tendencia al comentario fácil y denigrante hacia el docente: "son unos vagos...", "trabajan solo cuatro horas...", "tienen tres meses de vacaciones...", "viven de licencias...", etc. como si defenestrar al docente sea hoy el deporte nacional. Y aquellos que no son docentes y están muy lejos de sentir como uno de nosotros acuñaron una frase harto repetida: "no piensan en los chicos...son unos desalmados...".Yo no sé que penaran mis colegas pero particularmente creo que la situación de tensión política actual ha puesto nuestra ya larga lucha por recomposición salarial como un instrumento más al servicio de intereses partidistas. Eso. Pero ojo no caigamos en la trampa de creer que es solo eso, no. Es fue una situación fortuita del momento, la lucha siempre fue asi, con los distintos gobiernos: Alfonsín, Menem, De La Rúa...Duhalde, Néstor y Cristina. No me vengan ahora los PRO conque uno quiere desestabilizar al gobierno; este gobierno se está desestabilizando solo, desde el 10 de diciembre de 2015. Pero lo que dicen los medios ya es repetitivo. Lo que me duele es la opinión de personas con una formación importante que se pongan a fundamentar con tanta mediocridad que da risa. Muchos ignoran las leyes, otros ignoran los lugares donde trabajamos, algunos dicen saber que solo somos quejones que vivimos como "bacanes" transitando en autos de lujo, y los menos desconocen cuanto gana hoy un maestro que se inicia y un docente con 20 años de antigüedad. Creo que el 80 por ciento de las personas opina desde la ignorancia de esta profesión o desde sus intereses demasiados particulares. Soy docente de nivel superior, he trabajados por quince años en nivel secundario y también dicte clases en el nivel primario; he viajado a dedo por diez años entre mi formación y los primeros años de docencia; he viajado en motocicleta por quince años, varios años en una camionetita usada y los últimos años muchos me miraron con desconfianza cuando pude comprarme un o KM, nunca preguntaron por como llegué a eso. Todavía sigo trabajando lejos de mi hogar y me duele escuchar esos comentarios de que vivimos en autos de lujo. Nadie pregunta por como resultan nuestras clases en cursos donde alumnos se sentaban de a dos en una silla por falta de ellas, donde se dictaban clases en cursos de 3x3 sin ventilador ni menos aire acondicionado. Trabajé en Rio Muerto donde los alumnos te agradecen y se encariñan con vos por el solo hecho de elegir ese lugar para ir a enseñar. Excelentes pibes y pibas que soñaban con ser profesionales algun dia. pero nadie pregunta hoy eso. Cuestionan tu formación (sino pregúntenle a Baradel) con la impunidad que te da ser una figura famosa de TV. Y para colmo de males podemos llegar a encontrar a docentes cipayos y especuladores que ponen a esta lucha legítima a la altura de sus horarios e intereses personales, el oficio y los alumnos: bien, gracias. Los surcos que debemos dejar los que elegimos esta profesión no solo son en los conocimientos y el lenguaje sino por sobre todo en las actitudes, en la forma de ver al mundo y a nuestra libertad. Seamos libres primeros, de la ignorancia, de la mediocridad, de las miserias humanas, de la ambición. despues enseñemos, eduquemos, formemos. Sin educación no vamos a ningun lado pero sin maestros reconcidos en su esfuerzo y lucha cotidiana no podremos lograr lo otro. Ojalá nos sentemos a pensar luego de estos dos dias de paro y pensemos una educación plena, más justa e igualitaria.
Fabián Antonio Mancilla, Profesor en castellano, Literatura e Historia
